sábado, 9 de marzo de 2024

Poco nos pasa

En el texto de la parte inferior está el por qué del título: «Hasta aquí mi intento de embellecer la conclusión a la que he llegado, tras muchas reflexiones, desde aquella aciaga pandemia». 

Lo cierto es que me apetecía entretenerme con algo ligero. Sin dorados y con una paleta de colores sencilla. También sentía el deseo de mostrar todo ese desasosiego que, de tarde en tarde, me ha consumido viendo cómo funciona el mundo, en general y terrenos más cercanos, en particular. 

Como siempre, ha habido muchos cambios en todos los sentidos de los cuales no voy a dar cuenta. 

Como curiosidad: en un momento dado se me ocurrió trabajar con relieve —que es algo en lo que nunca he profundizado— e incluso empecé a trabajar con la «P» inicial, pero lo descarté.
Con la orla también enredé en diferentes soluciones aunque siempre a partir del diseño de un círculo inicial, que me costó modificar para el ángulo recto inferior:
En febrero ya tuve un boceto que me gustaba y, a partir de ahí, todo fue más sencillo.
Los primeros trazos con bolígrafos de gel de Muji de 0,38 mm.
Los colores, todos otoñales y pastel —la acuarela—, los tuve claros desde el principio, pero los rebordes de las letras, no. Fantaseé con introducir algún verde e incluso un bermellón, pero finalmente me decidí por un granate suavizado.
Y así ha quedado, finalmente. Ahora ya puedo pasar a otra cosa.
Por cierto, por fin llueve, aunque sea poco. Un abrazo.

Ferdinandus, d.s. 

 Finalizado en el segundo decanato del signo de Piscis del dosmilésimo vigésimo cuarto A. D.